miércoles, 7 de octubre de 2009

••Que difícil es ser un amigo imaginario hoy en día.

Siempre tienes algo que hacer: tantos blogs que leer, tantos contactos con quienes hablar, tantas terapias que tomar, lugares que visitar, mota que fumar, y personas que olvidar. Entre ellas Yo.

Ya no se puede ser como antes. No puedo hablarte en público mas. Señal de locura, dicen... y les crees.

Mis colores son cada vez mas neutros, o grises. Ya no brillo ni resalto.

Muero. Eso pasa: estoy muriendo.

Y pensando en canciones, en libros o en vodka, pero no en mi, ya nunca mas en mi. 

Yo me sofoco en éste baúl, aquí hace calor. Si, soy imaginario pero eso no es excusa para que te olvides de mi.

Imaginame otra vez, piensame de nuevo. No quiero ser despedido.

4 comentarios:

La Beba (S.A.) dijo...

Leer esto y con mi rola Waking Dream... oh por Dios... casi lloro.

Has cambiado mi pequeño...

...estas creciendo.

David Navarro dijo...

Tienes toda la estructura del escritor fugaz y ventilado que no oculta ni desoculta, eso es bueno... si tienes algo que decir. La idea de un amigo imaginario, en plano poético, o parabólico es genial, lo hiciste bien, algo sobrio para hablar de mota.... pero bien.

Saludos.

TheFaUsagi dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
TheFaUsagi dijo...

Yo creo que uno nunca debe olvidar a un amigo imaginario...son algo muy importante en la vida y aveces te ayudan a recuperar la cordura y a saber que existes...que eres real